Así fue. Muchas eran las expectativas puestas en el Recreativo - Osasuna, pero la realidad es que la mejoría mostrada en Mallorca se quedó estancada. El equipo que Lucas dispuso sobre el terreno de juego fue similar al de la jornada anterior, con las novedades forzadas de Casado y Lamas en la zaga. Era un buen momento para ofrecer alguna variante ofensiva como la inclusión de Sisi en lugar de Camuñas o la vuelta a la titularidad de Javi Guerrero, pero el buen partido de Marco Ruben le otorgó de nuevo la confianza del técnico.
El futuro del Decano se despeja levemente, pero aún deben cambiar muchas cosas
La verdad es que hacía tiempo que no se veía un partido tan malo en el Nuevo Colombino, aburrido a más no poder, especialmente en la primera mitad. Osasuna, que dominó mayoritariamente el juego, demostró por qué es el actual colista, ya que dispuso de un par de ocasiones clarísimas que rara vez se fallan. Camacho no se lo explicaba. Gracias Dady.
Por su parte, el Recreativo apenas inquietó la portería de Roberto, si bien disfrutó de varios corners a favor sin mucho peligro. Colunga, que aunque lo intentó insistentemente durante todo el encuentro, no tuvo su mejor actuación al perder muchos balones, fue el encargado de materializar la única ocasión clara tras un buen pase interior de Javi Guerrero, que entró en la segunda parte. Poco más que destacar; cuatro minutos de prolongación y final agónico con el público pidiendo la hora.
Más allá de posibles penalties o el retorno de la suerte, de cuya ausencia tanto nos estábamos quejando últimamente, está claro que en la situación en la que se encuentra el equipo lo importante es sumar de tres en tres para coger confianza y alcanzar cierta tranquilidad. Pero no es menos cierto que cuando el equipo vaya "sacando la cabeza" de ahí abajo, hay que exigirle más, porque a la larga, este juego no puede dar muchas alegrías. De momento se han encadenado dos victorias consecutivas cuando más hacía falta, pero ahora hay que ir mejorando el juego progresivamente para afrontar con más garantías los próximos compromisos .
En definitiva, el juego mostrado por el Recreativo fue bastante pobre , mientras que el resultado obtenido muy brillante; tanto, que ya es difícil obtener tres puntos habiendo ofrecido tan poco. Esto no siempre sucede, y debemos aprender de ello ahora para no llevarnos sorpresas en sucesivas jornadas. Esperemos que Lucas no sea conformista y esté tomando buena nota.
El futuro del Decano se despeja levemente, pero aún deben cambiar muchas cosas
La verdad es que hacía tiempo que no se veía un partido tan malo en el Nuevo Colombino, aburrido a más no poder, especialmente en la primera mitad. Osasuna, que dominó mayoritariamente el juego, demostró por qué es el actual colista, ya que dispuso de un par de ocasiones clarísimas que rara vez se fallan. Camacho no se lo explicaba. Gracias Dady.
Por su parte, el Recreativo apenas inquietó la portería de Roberto, si bien disfrutó de varios corners a favor sin mucho peligro. Colunga, que aunque lo intentó insistentemente durante todo el encuentro, no tuvo su mejor actuación al perder muchos balones, fue el encargado de materializar la única ocasión clara tras un buen pase interior de Javi Guerrero, que entró en la segunda parte. Poco más que destacar; cuatro minutos de prolongación y final agónico con el público pidiendo la hora.
Más allá de posibles penalties o el retorno de la suerte, de cuya ausencia tanto nos estábamos quejando últimamente, está claro que en la situación en la que se encuentra el equipo lo importante es sumar de tres en tres para coger confianza y alcanzar cierta tranquilidad. Pero no es menos cierto que cuando el equipo vaya "sacando la cabeza" de ahí abajo, hay que exigirle más, porque a la larga, este juego no puede dar muchas alegrías. De momento se han encadenado dos victorias consecutivas cuando más hacía falta, pero ahora hay que ir mejorando el juego progresivamente para afrontar con más garantías los próximos compromisos .
En definitiva, el juego mostrado por el Recreativo fue bastante pobre , mientras que el resultado obtenido muy brillante; tanto, que ya es difícil obtener tres puntos habiendo ofrecido tan poco. Esto no siempre sucede, y debemos aprender de ello ahora para no llevarnos sorpresas en sucesivas jornadas. Esperemos que Lucas no sea conformista y esté tomando buena nota.
