Concentración y valentía, claves de la victoria

Llegó el gran día. Probablemente, después del partido frente al Sevilla, éste sea el partido más esperado por todos a lo largo de la temporada. Un Recre con la soga al cuello recibirá en la noche de hoy (22:00 h; la sexta) a un Real Madrid que no puede permitirse pinchar si quiere mantener viva la lucha con el Barcelona. Pero sin duda, la mayor necesidad la tiene el conjunto recreativista, a tres puntos de la permanencia y con tan sólo 8 partidos por delante para solventar la situación. No se puede fallar más.

Sin embargo, mientras hay vida hay esperanza, y todo apunta a que hoy pueden darse una serie de circunstancias que ayuden a conseguir los tres puntos. El encuentro reúne una serie de ingredientes muy atractivos. Para empezar, habrá lleno y el público va a estar muy metido en el encuentro desde el primer minuto, consciente de lo mucho que se juega el equipo, aunque un año más tendremos que aguantar a esos falsos recreativistas que se sacan el carnet para ver a su verdadero equipo, pero ahí estará el resto para acallar sus voces. A esto hay que unir la presencia de muchos madridistas de la provincia, pero afortunadamente, cada vez son núcleos más minoritarios.

Casi con toda seguridad, los jugadores, que en estos partidos necesitan muy poca motivación, van a dar el 120%. Jugar frente al Real Madrid es todo un escaparate. Una de las claves será el grado de concentración que demuestren para no cometer errores que puedan ser aprovechados por el rival y el acierto rematador que tengan, que últimamente brilla por su ausencia. Fallar ocasiones tan clamorosas como las de las últimas dos jornadas no está permitido. Para ello, durante la semana se ha tenido especial cuidado en intentar aislar al equipo del entorno. Ha habido concentración en el Portil y entrenamientos a puerta cerrada. Todo para evitar que ese ambiente casi festivo previo de una gran cita como ésta se traslade al equipo. Aunque hay que decir aquí, que la aparición del técnico en un reportaje televisivo donde aparece lidiando una vaquilla, no es muy conveniente, y puede que hasta contraproducente, dado el momento por el que atravesa el equipo.


El otro factor que jugará esta noche un importante papel será la valentía, esa de la que hacía gala Lucas en el mencionado reportaje. Aunque durante la semana se ha comentado que no habrá revolución en el once y que seguramente saldrán los mismos hombres que jugaron en Barcelona, con la excepción de la vuelta de Adrián y de Iago, puede que sea el partido propicio para jugar con dos delanteros y meter más miedo. Ersen Martin, defenestrado hasta hace bien poco, ha demostrado en los pocos minutos que ha disputado, que, circunstancias extra-deportivas aparte, puede aportar mucho al equipo, ofreciendo algo de lo que está carente el equipo, remate y acierto goleador. Desaprovechar un factor psicológico como el del turco es casi un delito, ya que él sólo es capaz de levantar a la grada. Y si encima resulta que lo hace bien... menos motivos para no contar con él. Estando en una situación tan agónica, hay que dar lo máximo y poner en liza todos los recursos ofensivos disponibles.


El Madrid, por su parte, acumula unos registros propios de un campeón de liga. Con 69 puntos, se encuentra a 6 del líder y encadena una racha de 6 partidos consecutivos ganando a domicilio y está a punto de superar su record histórico. Además, suma 42 de los últimos 45 puntos en juego. Su última derrota data del 13 de diciembre, cuando el Barcelona le superó por 2-0. Números, que por simple cuestión de probabilidades, no podrá mantener por mucho más tiempo. En el recuerdo también quedan las últimas dos visitas, donde el Recreativo estuvo muy cerca de ganar el club blanco. A la tercera irá la vencida? Esperemos que hoy la liga está más decidida y que por una vez tengamos un arbitraje justo en este tipo de enfrentamientos.

Debemos impresionar al Madrid desde el primer instante y salir a por todas. No hay cabida ni para la especulación ni para la cobardía. Los equipos pequeños o modestos son capaces de dar la campanada si se lo creen. Por qué no íbamos a hacerlo nosotros?

Antes del partido se han preparado un par de marchas albiazules que alentarán la llegada de los jugadores, y ya en el campo, 10.000 aplaudidores azules y blancos por gentileza de Fororecre pondrán su granito de arena para culminar la hombrada.

Yes, we can.

Bien plantados, pero de nada sirve

El Recreativo se plantó en el Camp Nou con la necesidad de sorprender para arrañar algo positivo dado su estado comatoso, pero sin embargo, ya en el primer minuto se colocaba abajo en el marcador. Tras una pérdida de balón en la banda contraria el balón llegó a Henry y éste se encargó de dejar atrás a Nef para dar el pase de la muerte a Iniesta, que llegaba desde la segunda línea. Jugada un tanto desafortunada ya que ni Lamas, en primera instancia, ni Morris, pudieron cortar el pase a pesar de haber estado muy cerca de ello.

Es de suponer que la premisa de toda la semana había sido aguantar al rival como buenamente se pudiera y evitar encajar pronto un gol, pero como suele decirse, el fútbol tiene estas cosas y una vez más ( y van...) tocaba remar contracorriente y hacer lo imposible. Aún así, el equipo no se descompuso. El empate pudo llegar muy pronto en una clamorosa ocasión de Nayar, que remató sólo en el área pequeña, pero Víctor estuvo rápido y sacó la pelota. Mientras tanto, el Recre juntó bien las líneas y no hizo mucho por querer jugar la pelota, más preocupado de sus tareas defensivas que de mirar la puerta contraria. De llegar alguna ocasión habría que aprovecharla, pero éste tampoco era el día. El Barcelona dominaba la pelota como en él es habitual (posesiones por encima del 70%) y contaba con tímidos acercamientos, como los de Bojan e Iniesta, el mejor en el día de ayer, pero el tiempo corría en contra del Recre. El conjunto catalán sobaba y sobaba la bola mientras los de Lucas, atrincherados, vasculaban de un lado para otro. Un Messi desganado estuvo prácticamente desaparecido durante todo el partido mientras Eto'o, Puyol y Xavi presenciaban el partido desde el banquillo.

Mediada la primera mitad, Lamas tuvo el empate en su cabeza tras una falta lateral botada por Casado, pero desafortunadamente el balón golpeó involuntariamente en la mano de Sylvinho, que se encontraba de espaldas. De aquí al descanso, algún acercamiento azulgrana más y poca presencia del Recreativo, que al menos llegaba con una mínima desventaja en el marcador y no concedía demasiadas ocasiones. La segunda mitad mejoró. Hubo más alternativas y apareció la polémica arbitral. En el 54' Valdés salió de forma alocada arrollando a un hasta ahora desapercibido Marco Ruben, que le ganaba la posición en su intento de remate, pero para el árbitro fue un simple choque. Al cuarto de hora se anuló un gol a Henry por fuera de juego tras buena jugada de Iniesta en lo que sería la antesala del segundo gol del Barcelona. Otra buena acción de Iniesta acabó con Morris introduciendo la pelota en propia puerta al intentar cortar un peligroso centro que buscaba la entrada de Henry en el punto de penalty. El partido no daba para mucho más. Desde el banquillo no llegaba reacción alguna y los mejores momentos recreativistas ya habían pasado.

A quince minutos del final llegó un último intento a la desesperada y entraron Akalé y Ersen por Nayar y Marco Ruben. Antes, Guardiola había movido el banquillo para recuperar el ritmo del juego con Xavi. Para esta fase final del encuentro aún quedaban dos nuevas polémicas. En primer lugar, penalty a favor del Barcelona por mano involuntaria de Casado que no fue y que Riesgo le paró a Messi, haciendo justicia, y, en segundo lugar, gol mal anulado a Ersen Martin por supuesto fuera de juego. A decir verdad, ambos goles anulados fueron bastante justos. El turco, en la primera que tuvo ejecutó un perfecto remate, demostrando aún se puede sacar bastante fútbol. de él. Los linieres privaron así al Decano de la oportunidad de darle algo de emoción al encuentro.

En definitiva, las circunstancias pusieron aún más difícil una hipotética sorpresa, aunque el beneficio fue el mismo de siempre. Hubo buena disposición en el terreno de juego a pesar de los despistes, pero la realidad es que el margen de error ya es prácticamente inexistente y el equipo aún se encuentra en la mitad del Tourmalet. Y por si fuera poco, los rivales más directos siguen sumando. La permanencia ya queda a 3 puntos.